28 julio 2012

River flows in you

Cuando las ultimas estrellas dejaron de brillar entendio que se habia perdido. Habia seguido la misma ruta de siempre, pero el camino parecia errado. Y el tambien erraba entre sus fantasias, que parecian haber cobrado vida repentinamente. ¿Que ocurria? No acertaba a decir por que tenia visiones que vagaban libremente entre sus pensamientos, como si algun tipo de magia ancestral se hubiera apoderado de su ser.

Entonces la vio. Una dama paseaba por el camino y parecia sumida en sus propias reflexiones. La conocia, la habia visto en otras ocasiones, pero jamas habia osado acercarse a ella. La joven le vio y cuando sus miradas se cruzaron parecio quedarse de piedra. Fônsö no supo reaccionar y se quedo mirandola a su vez. La energia que manaba entre ambos no tenia ninguna explicacion logica.

- ¿Lord Fônsö? -pregunto ella con voz cantarina.
- Si, soy yo. ¿Quien sois?
- Me llamo Lady Whers. 

Fônsö tuvo otra vision, pero la guardo para si. Sonrio a la joven y comenzo a departir con ella sobre el castillo al que pertenecia, las veces que la habia visto paseando por la villa... el tiempo pasaba y el amanecer dejo paso a un dia soleado en el que las unicas sombras que se proyectaban eran las de los arboles que dominaban el camino.

Un crujido repentino interrumpio sus palabras. Fônsö se puso en guardia y empuño su espada, pero Lady Whers fue mas rapida. De un agil movimiento tomo la vara que llevaba a la espalda y la transformo en metalica de modo que decapito al hombre que acababa de emerger entre los arbustos. Otros hombres aparecieron detras de el y Fônsö defendio a la joven, que prosiguio degollando a cuantos se interponian en su camino.

- Menuda emboscada... me he puesto algo bervioso -comento Fônso una vez terminaron. Realmente le habia causado cierta sorpresa que la joven fuese tan sangrienta.
- Nada del otro mundo... -dijo esta con un curioso brillo en los ojos que recordo al guerrero otros ojos que habia visto hacia muy poco...- seria buena idea regresar al castillo.
- La verdad es que... ¿Como es que conoceis la lengua del bosque?
- Simre me han gustado las lenguas ancestrales.

El joven la miro y de nuevo tuvo aquella sensacion, como si se enfrentara a la mirada de una esfinge. Tenia un aura muy poderosa, pero era imposible que fuera...

- Eres el espiritu del bosque -asevero. Ella le dirigio una mirada que se le clavo en el alma.
- Quizas tu lo seas -respondio simplemente.
- No lo soy...
- No lo sabes.
- Intentaste matarme...
- Mi flecha no te hubiera alcanzado jamas.
- ¡De modo que eras tu!

Lady Whers sonrio enigmaticamente y nuevamente desaparecio con una voluta.

- No pasees por mi bosque si sabes lo que te conviene... -escucho Fônsö en algun hueco de su mente.
- Hare lo que me venga en gana.

Mas visiones, imagenes cruentas sobre lo que les ocurria a los que desoian sus ordenes.

- Nunca me harias daño -afirmo Fônsö.
- Te muestras muy seguro -comento ella apareciendo a sus espaldas.
- Quieres algo de mi.
- ¿Me lees el pensamiento? -pregunto ella sin realmente parecer impresionada.
- Si.

La joven sonrio ampliamente y creo una pequeña esfera de luz en su mano para despues transformarla en un amuleto con forma de caliz que tendio a Fônsö.

- Toma, uqe qpeocveche.
- No entiendo...
- Ya lo haras.
- ¿Que sabes del meteorito?

De nuevo aquella sonrisa enigmatica.

- Eres muy directo.
- Si, señorita.
- Aun no puedo revelarte nada acerca del meteorito... tu mismo lo descubriras.

Fônsö se quedo pensativo mientras Lady Whers observaba los cadaveres que habian dejado en el bosque sin aparente interes. Al fin y al cabo era como mirarse en un espejo...



Dedicado a Alfonso, ¡feliz cumpleaños gominolo!

27 julio 2012

Epica

El sol hacia tiempo que brillaba en el firmamento cuando Wherynn abrio los ojos. La noche anterior no habia podido admirar las vidrieras que iluminaban la sala en aquel momento, gracias a la luz solar que se filtraba a traves de ellas llenando la sala de colorido, y se entretuvo un rato mirando los diferentes tonos que creaban los cristales. Tan distraida estaba que ni siquiera se percato de que Ädri habia entrado en la sala portando sendas fuentes.

- ¡El desayuno! -mostro ufano el chico. Habia traido bollos de chocolate, frutas del bosque, alguna tostada, un poco de mermelada de fresa y albaricoque, bizcochos y zumo natural.
- ¡Menudo festin! pero te ha faltado la hidromiel, acorde con la sala -señalo su amiga en referencia a la decoracion medieval.
- Ya... pero le traigo miel, señorita -dijo mostrandole un diminuto tarro que saco de su bolsillo.
- ¡Creepy nice! -exclamo Wherynn, que adoraba aquel dulce manjar -¡pura ambrosia!
- Si, eso...

Los dos jovenes desayunaron en la hermosa sala mientras decidian que podian ocultar los ingredientes en aquel lugar hasta que supieran como elaborar la pocion que deseaban. Nadie los buscaria en ese sitio, ya que la imaginacion de Ädri lo habia creado.

- Me encanta la sala de los menesteres, de verdad -suspiro Wherynn una vez la abandonaron.
- Vi una el otro... no, espera, estaba pensando...
- ¿Que dices, Goggy?
- ¡¡No me llames Goggy!!

Wherynn dio esquinazo a su amigo a traves de uno de los retratos, que en ese momento acababa de abrirse para dejar pasar a otros estudiantes, y Ädri se quedo tan sorprendido que no supo reaccionar.

- ¡¡¡Freaky!!! -grito mientras el lienzo se cerraba.


Tras las clases de la mañana los dos Griffindor se reunieron en el Gran Comedor y Ädri se percato de que Snape les lanzaba miradas asesinas.

- Mira a Snapito... ¡que miedo!
- ¿Si o que?
- ¿Que? -pregunto Ädri, confuso.
- Jaja, nada... ¿que tal por clase?
- Me dormi en Historia, explote unas estanterias en Encantamientos, transforme una rana en libro en clase de Transformaciones y luego en la hora libre me di una vuelta por la biblio. ¿Tu?
- Apuntes, hechizos, dejar volar la imaginacion en Adivinacion... mas normal que tu por lo menos.
- Ya ves...

Durante la comida el profesor de Pociones siguio mirando a ambos jovenes mientras estos le sonreian imperterritos cada vez que se cruzaban con su mirada. Cuando acabaron salieron del comedor y se dirigieron rapidamente a la sala comun sin darle tiempo a que los siguiera o pudiera decirles nada.   

- ¿Tu crees que sospecha algo? -pregunto Wherynn en cuanto se cerro el retrato de la Señora Gorda.
- Ya debe saber que cuando piensas en pollo nada bueno sucede...
- En el fondo debe creer que solo pienso en eso...
- No, incluso yo pensaba en pollo esta vez. Sabe que tramamos algo.
- ¿Tu en pollo? ¿por que?
- ¡Me dio por ahi! -contesto Ädri riendo.


El resto de la tarde ambos jovenes acudieron a sus respectivas clases y Ädri estuvo de lo mas relajado hasta que se dio cuenta de que a aquella hora le tocaba Pociones dobles con Slytherin. Con cautela se deslizo hasta las mazmorras por los pasillos mas desolados y pronto estuvo ante la puerta de la clase, donde Snape los esperaba y nuevamente le lanzo una mirada asesina.

- Veo que el pollo con almendras de esta mañana le ha encantado... -comento el profesor, mordaz.
- ¡Estaba buenisimo! -respondio el joven de lo mas alegre e inocente.
- Me alegro...

Ädri penetro en la oscura estancia donde la neblina proveniente de los calderos apenas le dejaba ver por donde caminaba y un Slytherin le propino una patada en la espinilla. Como venganza le clavo la varita en las costillas mientras sonreia al profesor e imaginaba un pollo gigante rodeado de almendras bailarinas.

- Cinco puntos menos para Griffindor.
- Por descontado... -murmuro ironicamente de forma imperceptible Ädri mientras ocupaba su puesto.
- Esta tarde prepararemos una Pocion del Olvido. Encontraran los ingredientes necesarios en sus mesas. Disponen de una hora, ¡empiecen!

Los alumnos comenzaron a preparar sus pociones y Ädri se fijo en que le faltaban algunos ingredientes y las cantidades no eran correctas. ¿Pretendia sabotearle? bueno, nada que no pudiera solucionar con un sencillo accio... 

- Se lo que traman... -susurro Snape a su espalda.
- Lo dudo mucho, tenemos demasiados deberes como para pensar en nada... -contesto Ädri de forma cortante.
- ¿Estan madurando? eso si que lo dudo... dejen en paz a los Sly.
- Que nos dejen tranquilos ellos, estoy harto de patadas e insultos.
- Cinco puntos menos para Griffindor.

Ädri le miro con odio y el profesor se alejo triunfante. Quizas el plan tendria que variar ligeramente...



Dedicado a Adrian, ¡feliz cumpleaños neno!

26 julio 2012

Wicca

Era la ciudadela mas hermosa que habian contemplado jamas. Las casas se alzaban imponentes alrededor de parterres y fuentes que adornaban las avenidas dandoles un aspecto intemporal, aunque estaba claro que la civilizacion moderna habia creado aquel magnifico lugar. Yrguv apenas podia reconocer su hogar, pero tenia claro que era el mismo sitio que habia vislumbrado en su sueño.

- Eres nuestra guia -recordo Mâry a la antigua genio.
- ¿Y si aparece mi prometido? -pregunto la joven asustada.
- Le engañaremos, o le damos una paliza, ya veremos...
- Shÿla... no bromees, no sabemos de que es capaz.
- Tenemos pociones de combate y mucha imaginacion, esperemos que sea suficiente.

Nälya suspiro y miro a Mâry, que le hizo un gesto señalando a unas figuras encapuchadas que acababan de cruzar hacia un oscuro callejon. Aquello les parecio de lo mas sospechoso y topicazo, por lo que decidieron ignorar a quienes fueran y continuar la senda de los sueños de Yrguv.

- ¿Por donde..? -comenzo Mâry, interrumpiendose cuando vio a Shÿla estremecerse. Nälya asio su mano con fuerza tratando de adentrarse en sus sensaciones y la joven cerro los ojos dejando fluir su poder. Ser capaz de captar la oscuridad en los corazones que la rodeaban era su mayor don.
- Es uno de los sitios mas tetricos en los que hemos estado... todo aqui rezuma maldad.
- No sera para tanto... -comento Mâry.
- No es el Sÿrmû en el que me crie, de eso no hay duda. Es muy hermoso, incluso mas que en mi epoca, pero como dice Shÿla todo tiene un halo maligno que no me gusta nada...
- Seria bueno que pusieramos cara de malotas, en plan princesas de las sombras, o empezaremos a levantar sospechas...
- Lo que realmente seria util es cambiar el rostro de Yrguv. Si su prometido anda cerca la reconocera y eso no nos conviene -sentencio Mâry.

Las jovenes brujas se escondieron tras uno de los jardines y Nälya transformo a Yrguv, cambiando sus ojos almendrados por unos grandes ojos aguamarina, su espesa cabellera castaña por una melena negra larga y lisa y creando algunos lunares en su rostro.

- Sigue siendo una preciosidad -suspiro Shÿla con cierta envidia.
- Eeeh... gracias -respondio la antigua genio sonrojandose- lo importante es que resulte irreconocible.
- Nadie sabra que eres tu. Y ahora, guianos.

Yrguv las condujo a traves de la ciudadela y les fue señalando los lugares mas llamativos que aparecian en sus sueños mientras las dirigia hacia la mansion de su prometido, en la que debian robar unas semillas que resultaban vitales por alguna razon que desconocia.

- Tu cristal... esta brillando -apunto Mâry.
- ¿Que significa?
- Quizas tu prometido este cerca...
- Es la fuente de su poder -menciono Shÿla en un susurro.
- ¿Como?
- La magia que les mantiene unidos. Por eso tiene poder sobre ella, por eso la pudo convertir en genio -explico Nälya.
- ¿Pero cuando..?
- Telepatia -respondio sencillamente Nälya.


Nadie menciono nada mas hasta que llegaron a la gran mansion, cerca de la cual el cristal brillaba aun con mas fuerza. Mâry y Nälya decidieron quedarse en la retaguardia mientras Yrguv y Shÿla conseguian las semillas, que se encontraban en el sotano.

- Las esconde en un cofre bajo llave, pero se como abrirlo -musito Yrguv una vez se encontraron en el lugar.
- Si no ya sabes, un pequeño hechizo y...
- No sera necesario -afirmo tomando un cofre de oro entre sus manos y golpeandolo suavemente en determinados puntos, logrando que se abriera con un leve crujido. En su interior habia unas semillas azuladas que recogio rapidamente.
- ¡He oido un ruido! ¡salgamos de aqui, rapido! -Shÿla cogio a Yrguv de la mano. Esta poso la otra mano en la espalda de la bruja y proyecto una onda en ella- Estoy a sus ordenes, mi ama -afirmo la bruja con voz monocorde.
- Perfecto... -dijo Yrguv con voz maligna.



Dedicado a Maria, ¡feliz cumpleaños moza!

19 julio 2012

Runa Oesed

La sala de castigo se encontraba inusitadamente silenciosa teniendo en cuenta que Sÿl, Thäis y Wherynn se encontraban en ella. La profesora Trelawney paseaba por el lugar hablando para si misma mientras observaba su bola de cristal, repleta de neblina, y las chicas trataban de ordenar los polvorientos ejemplares de adivinacion, las tazas de te y las velas aromaticas.

- Me agrada que mi aula sea hoy la sala de castigo para vosotras, requeria que mentes abiertas como las vuestras clasificaran mi rincon -comento con voz eterea. Las jovenes se miraron entre si y ocultaron sus sonrisas. Si por "mentes abiertas" se referia a que tenian una gran imaginacion y sabian como canalizarla, entonces si, eran idoneas para la adivinacion- ¿Como os va con los deberes?
- A mi muy bien, la lectura de manos de Sÿl resulta de lo mas interesante -respondio Wherynn.
- Quiromancia, querida.
- Si, disculpe...
- Las manos de Thäis tambien revelan cosas interesantes -dijo Sÿl- le va a ir de fabula en el amor.
- Pues Wherynn... -empezo Thäis, siendo interrumpida por una lechuza que penetro en la sala.

La profesora Trelawney recogio la nota que portaba el ave y la leyo rapidamente para despues salir de la sala diciendo que volveria enseguida.

- Fijo que era una nota de amor de Filch, que la citaba en los jardines...
- ¡Tu siempre emparejando a todo el mundo!
- Deja a Sÿl, yo estoy de acuerdo con ella... ¿no veis lo contento que anda ultimamente? -rio Wherynn.
- Este castigo es una tortura... me apetece robar velas -arguyo Sÿl.
- ¿Por?
- ¡Que se yo! ¡por hacer algo!

Wherynn tomo entre sus manos la bola de cristal de la profesora y comenzo a fingir que se concentraba imitando los gestos dramaticos de la mujer. Las otras rieron a carcajadas y esperaron a ver que hacia su amiga.

- Esperad... ¡estoy viendo algo! -exclamo Wherynn.
- No... ¿en serio? -dudo Sÿl.
- ¡Avalon! ¡tras la bruma! -grito la joven provocando mas carcajadas en sus amigas.
- A mi me haria ilusion adivinar algo de verdad... -comento Thäis cuando dejo de reir.
- Me gustan mucho las tablas lunares... la actinomancia es lo mejor. ¡Y la oniromancia!
- Dijo la de "lectura de manos". Actinomaaancia -enfatizo Sÿl con voz intelectual. Wherynn le arrojo una piedra preciosa y fallo estrepitosamente, de modo que el mineral impacto contra una de las tazas de te haciendola añicos.

Una niebla ambarina cubrio la estancia por un momento y las chicas se quedaron inmoviles, demasiado asombradas por la vision que estaban teniendo. Cuando la niebla se despejo, encontraron a la profesora Trelawney en el umbral de la puerta mirandolas con curiosidad.

- Magia Oesed... -dijo con voz susurrante.
- Imposible... 
- Lo es, querida. Los arcanos nos han revelado la forma de perpetuar las visiones que tenemos en sueños y hacerlas realidad por un instante.
- Que nitidez...
- Que pedazo de... -empezo Sÿl antes de interrumpirse. Wherynn la miro suspicaz y la chica se sonrojo- ¡no me referia a..!
- ¡No, no! prefiero no saberlo...
- ¡Pero que no...!
- ¡Ssssh!
- ¡¡PIZZA!!

Una mota ambarina se movio suavemente con la brisa y Sÿl la recogio entre sus dedos para despues volver a dejarla libre.

- ¿Pizza envenenada? -pregunto Thäis.
- Si... ¡era solo una idea! -añadio rapidamente Sÿl al ver el rostro de la profesora.
- La mente es compleja, querida. Nadie te juzga...
- Nadie, nadie... -afirmo Wherynn a pesar de la mirada asesina de su amiga.
- Podeis marcharos, queridas, debeis meditar acerca de lo que habeis contemplado...

Las chicas se retiraron apresuradamente por si la profesora cambiaba de opinion y esperaron a estar solas para hablar.

- ¿En serio viste pizza? -le pregunto Thäis.
- No...
- ¿Y has dejado que crea que viste una pizza envenenada? -rio Wherynn.
- Dije lo primero que se me ocurrio... luego me arrepenti, pero era tarde, ¿no?
- Entonces...
- ¿Vosotras que habeis visto? -pregunto Sÿl antes de que Wherynn completara la pregunta.
- El Bosque Prohibido -dijo esta.
- ¿De verdad?
- Si... y de hecho deberiamos ir a la biblioteca... en mi vision aparecia una runa y tengo la sensacion de que significa algo...
- ¿Intuicion? -insinuo Thäis.
- No se, era muy vivida...
- Como tus sueños -observo Sÿl.
- Si, tal vez, es posible...

Las chicas pasaron por delante del retrato de Sir Cadogan, que esgrimio su espada y asusto a su caballo, que abandono el lienzo.

- Señoritas... -saludo educadamente a pesar de que ellas le ignoraron.
- Voy la biblioteca, ¡nos vemos en la sala comun! -dijo Wherynn tomando un atajo a traves de uno de los pasillos.
- ¿Que..?
- Dejala, ya volvera -suspiro Thäis- vamos a la sala comun, quiero escribir en mi diario.
- Vale... -cedio Sÿl, aunque sospechaba que su amiga habia visto algo mas que no habia querido compartir. Menos mal que no era nada relacionado con su vision, ¡pero que pedazo de..!



Dedicado a Sylvia, ¡feliz cumpleaños Slytheriana!

Rhythm of the night

El aire nocturno les rodeaba con su frio abrazo mientras volaban hacia Körm. Adoraba aquella sensacion de libertad, tanto que si por ella fuera no haria otra cosa aparte de surcar los cielos en las noches eternas que se presentaban ante ella. Eternas, siempre y cuando aquel vampiro no tuviera razon...

- ¡Laguna Körm! -dijo Crälos señalando una pequeña extension de agua en el horizonte.
- Oye... no preguntamos que aspecto tenian esos documentos... -comento Râsky, seria.
- Digo yo que serian folios y eso...
- ¡No, hombre! me refiero a que tendran montones de papeles, ¡y nosotros ni una pista!
- Da igual -contesto el joven, despreocupado- no hay tarea que se nos resista.

Los dos amigos sobrevolaron la zona hasta encontrar una pequeña cupula de cristal, que dedujeron era la base humana, y descendieron en sus proximidades. Rasky comenzo a caminar de puntillas mientras Crälos paseaba tranquilamente por los alrededores buscando la entrada al lugar.

- ¡Crälos! -susurro la joven de forma casi inaudible.
- Dime.

- ¡Chss! ¡mas bajo!
- Dime -repito de nuevo arrodillado y con su voz mas gutural.

- ¡No hagas el tonto! ¡esto es serio!
- Estas muy rara, si hace un momento en la fiesta te lo tomabas a broma...

- Lo he estado meditando... tal vez tenga razon, tal vez el destino esta en nuestras manos...
- ¿Intuicion femenina?
- No se... -musito Râsky, cuya mirada se perdio en el vacio.


La melancolia se habia vuelto a apoderar de ella. Temia el fin de la existencia, de la libertad que poseia, de perder todo lo que amaba... La niebla que la rodeaba parecia nublar sus pensamientos. Suerte que tenia a Crälos a su lado, siempre parecia optimista. O al menos, dispuesto a hacer alguna tonteria para que sonriera de nuevo.

- Es el Ölyne mas emocionante de las ultimas decadas, ¿eh? -comento algo mas animada.
- Mujeres... creo que he encontrado la puerta.

El joven señalo un diminuto pomo de metal en la cupula y trato de abrir la puerta. Naturalmente, estaba cerrada con llave.

- No entiendo por que de cristal... ¿no se supone que guarda secretos? -pregunto Râsky.
- La mejor forma de ocultar un secreto es poniendolo al descubierto. Me refiero, al hacer la construccion transparente nadie imaginaria que custodia algo de importancia...

- Bueno, ¿entonces la rompemos?
- ¡Ala, que bruta! seguro que hay un forma mas elegante de acceder... -comento Crälos mientras cogia una piedra.

Un sonido metalico rompio el silencio y Crälos mostro ufano el cerrojo destrozado a Râsky, que lo arrojo en unos setos cercanos tras examinarlo con poco interes. Despues, los dos amigos penetraron en la estancia sigilosamente, aunque como bien habia apuntado Crälos los humanos tenian poco oido para poder escuchar sus pasos normales.

- Documeeentos, documentiitos, ¿donde estaiiis? -pregunto el joven en un susurro.
- Si tienen camaras de seguridad la hemos fastidiado... -dijo Râsky.
- Pues fijo que tienen, pero a nosotros no nos pueden grabar.
- Eso son supersticiones...
- No, no, el freaky de la gimkana me dijo que habia inutilizado las camaras. Este plan ya estaba trazado mucho antes de que nos lo encomendaran... -le explico Crälos con voz conspiratoria.


Ambos descendieron por unas escaleras hasta una sala repleta de estanterias y papeles y se pusieron a rebuscar al azar. Graficas, calculos interminales, tablas numericas y formulas complejas era todo lo que podian ver, pero nada en referencia a la misteriosa evolucion climatica de la que les habian hablado.

- ¿Y que pasa si regresamos sin los documentos? -pregunto Crälos tras un largo rato.

- Me parece que tendremos que averiguarlo... porque yo no encuentro nada.
- Bueno, echamos un ojo a la otra sala y nos largamos, pronto amanecera.

La estancia contigua era algo mas pequeña, por lo que la examinaron con rapidez. Râsky inspecciono las paredes, el suelo e incluso el techo por si habia algun tipo de abertura secreta que pudiera contener sus documentos, pero no la encontro. Tras hacer lo propio con las anteriores salas, ambos jovenes decidieron partir hacia donde los esperaba el de la gimnaka.

- Que lastima... ahora estoy intrigado. ¿Realmente la tierra volvera a ser la misma?
- Todo esto me parece muy sospechoso... si en ese sitio estudian el cambio... ¿por que no hay ningun documento que lo acredite? -razono Râsky.
- Es posible que los hayan ubicado en otro lugar mas seguro...
- ¿Pero donde?
- Que se yo, no estoy para adivinanzas. A mi que me digan donde cogerlos y los consigo, pero que no me hagan buscarlos en plan mapa del tesoro...
- Oh...
- ¿Que?

Râsky tan solo señalo al horizonte, donde el primer rayo de sol comenzo a brillar.



Dedicado a Vero, ¡feliz cumpleaños guapa!