17 octubre 2011

Labyrinth

The magic and the strengh of my power
it was beyond my wildest dreams...


El portico de entrada es de piedra gris y majestuosa. Es un laberinto hermoso por fuera, y peligroso por dentro. Las decisiones conducen por su interior de forma irremediable y pueden hacer que pierda el camino para siempre...
Debo entrar, solo de esta forma liberare la mente. Soy inmortal, me encuentro en una realidad espiritual donde nada puede dañarme, donde encuentro la paz. Libre como en un sueño. Quiero encontrar el camino, saber el por que de todo lo que ocurre a mi alrededor y no me permite hallar la paz. Solo conquistando el laberinto lo descubrire.

La primera estancia es de piedra, como el exterior del laberinto, esta tenuemente iluminada por luz que parece proceder de la propia roca y tiene dos puertas: una negra con brillantes estrellas y otra carmesi. ¿Cual escojo? la carmesi me atrae mas, aunque realmente... la oscuridad... no, voy hacia la luz. Puerta carmesi, en busca de la esencia.

La siguiente estancia es mas amplia, similar a la anterior pero iluminada por velas, y tambien hay dos puertas. Una de ellas esta recubierta de hojarasca y la otra parece hecha... de niebla. La acaricio, es solida. Miro hacia la de hojarasca y sonrio, siempre quise traspasar una puerta asi. Suerte que nunca tuve la oportunidad. Niebla, en busca de la autentica esencia.

La siguiente sala me ha deslumbrado. Es de ambar, un buen augurio, no cabe duda. Si encuentro alguna puerta de ambar en este laberinto la atravesare, salvo que las otras opciones sean aun mas fuertes. Me fijo en las puertas, esta vez son tres (otro buen augurio) y son indescriptibles. Una es de musica, como corrientes de aire de colores y melodias variadas, y tiene el pomo de oro. Otra esta hecha de silencio, no tengo palabras para describir su aspecto, el pomo es de plata. La tercera puerta no existe, esta en un plano espiritual que ningun mortal vivo puede alcanzar. Escojo la musica.

Hace frio en esta nueva estancia, y sin embargo una de las puertas es de fuego e irradia un calor increible. La otra es de hielo y el propio frio crea una neblina a su alrededor que le da un toque mistico, mientras que la tercera no encaja con las otras, es de madera oscura y reluce a la luz de las antorchas que iluminan la sala. Fuego o hielo... el fuego me representa, pero el hielo seria mas sencillo de atravesar... Duda. Me gustan los retos, ¡fuego! Me acerco a la puerta, realmente irradia calor... no tiene pomo, solo hay que pasar. Comienzo a cruzarla pero me aparto inmediatamente, ¡quema! como puede ser... soy un espiritu, no puedo sentir dolor. Miro hacia la puerta de hielo, no supone ningun reto... precisamente por eso he de cruzar la de fuego, esta claro. Y rapido, la tortura sera menor. Cruzo agilmente y por un instante creo morir de dolor, las llamaradas se me clavan y me desgarran por dentro, cegandome y casi haciendome olvidar que hago aqui.

Lo he logrado. Miro hacia atras, orgullosa, una valiosa leccion. Sonrio y miro las nuevas puertas de esta sala repleta de simbolos. Una puerta con runas y otra con palabras en una lengua que parece elfico. ¿Solo dos puertas? Las decisiones se estan poniendo cada vez mas dificiles, seguramente estoy llegando al centro del laberinto. Bueno, adoro el elfico, representa la originalidad de una mente brillante, mientras que las runas son misteriosas y reales... y voy hacia el misterio de la esencia pura, asi que puerta con runas.

Que estancia mas curiosa... tres puertas esta vez. Una claramente representa la vida real, otra un sueño y la otra es negra, completamente negra. Creo que simboliza la muerte, lo desconocido. Miro hacia la puerta del sueño, tiene miles de nebulosas y figuras desdibujadas, un tacto increiblemente real para tratarse de un mundo onirico y se oyen voces y melodias en la lejania... Cruzare esta, los sueños nos conectan con el inconsciente y podemos aprender mucho de ellos.

Una sala de oro y ambar, con antorchas por doquier, simbolos runicos y en la que suena una tenue musica. El corazon del laberinto.

Estoy encerrada.



Dedicado a Thais, una romantica.

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