12 junio 2019

Erised Rorrim


En las nieblas del destino caminaban por las brumas de la existencia como dos seres vacíos en busca de las tinieblas. Las incógnitas surgían en un ciclo infinito como dos espejos que reflejan el mundo elegido. Su voz rompió el silencio con una mentira vana, el equilibrio de los mundos se fragmentó como un cristal... El universo se rasgó en dos caminos tan parecidos como diferentes dentro del mismo espejo. Y caminaba por ambos mundos sin pertenecer a ninguno con el corazón dividido y la mente en dos realidades...

Sin existir, sin ser, un bosque bajo la piel, un viento desgarrador de mentiras su clamor, un mundo oceánico, otro oculto en el velo, un mundo sin nombre que... Su voz en los elementos, su voz en los elementos deseando ser a través de él...

Vio el camino del espejo, Erised y su reflejo, ambos giraron en sueños y se rompió en mil pedazos... El lugar estaba oscuro, una estrella cayó en tierra, un dragón murió en cenizas, un minotauro salió del laberinto, un fauno sátiro tomó su aulos y el espejo volvió a juntarse...

Entró al laberinto con el minotauro y un hilo de oro la conectaba al fauno... 


Dedicado a mis serdos de las tinieblas.

2 comentarios:

Licaón dijo...

Que chula Wher =) Otra entrada con una comunión con la música espectacular. De hecho me he fijado que mi velocidad de lectura iba marcada porque cambiaba donde posaba los ojos con el compas de la melodía, y los golpes fuertes me llevaban a saltos de párrafos y de intensiadad. Muy buena =)

Un abrazo,
Licaón

Wherynn dijo...

Creo que he perfeccionado la técnica a límites insospechados... Me alegra haber logrado el cometido!! Estas vienen puras de Australia sin intervención de la escritora :)

Un besote!