Paseaba silenciosa por la inmesa biblioteca. Hacia tiempo que no venia y ya lo necesitaba. No podia creer cuanto tiempo habia permanecido alejada de las estanterias, de los libros, de todas las historias que habia leido sin olvidar. Tiempo para la reflexion... Aprete un libro que llevaba en la mano y lo meti en uno de los pliegues de mi tunica. Sieempre de tunica... xdd.
Al rato de estar caminando encontre una antologia poetica con once poemas, cada uno distinto al anterior pero todos hermosos a su manera:
El primero narra una triste oda al amor imposible y esta plagado de bellas metaforas.
Prosegui mi marcha caminando sin pensar entre los diferentes pasillos, contemplando las columnas y las vidrieras... hay cosas que no cambian, uno no puede evitar ser como es. Aprete mi viejo libro... ¿mi? Aprete el viejo libro que escondia en la tunica y segui perdida en mis ensoñaciones hasta que llegue a la seccion de fantasia. ¡Ah! aqui habia novelas que me traian gratos recuerdos. Mire de pasada el antiguo volumen titulado "Las mil y una formas de enamorar a tu enamorado" y sonrei cuando muy cerca de este vi el otro acerca de los multiples y fallidos intentos en los que una simpatica bruja trataba de envenenar a su mortal enemigo, que a su vez era uno de sus mejores amigos. Y casi al lado ese libro tan extraño... es como si me hubieran escrito a mi en sus paginas, pero con ligeras variaciones. Nos parecemos tanto... Curiosa seccion esta de fantasia.
Cerca de el encontre a otros dos viejos conocidos. Menudas risas con aquellos dos, entre sus paginas se escondian historias tremendamente originales y era imposible aburrirse con ellos. Pero era hora de subir las ultimas escaleras...
Al rato de estar caminando encontre una antologia poetica con once poemas, cada uno distinto al anterior pero todos hermosos a su manera:
El primero narra una triste oda al amor imposible y esta plagado de bellas metaforas.
El segundo habla sobre la calidez de los sentimientos puros.
El tercero acerca de la amistad y la distancia.
El cuarto es un poema comico acerca del lenguaje.
El quinto habla sobre el verano.
El sexto contiene dulzura y frialdad al mismo tiempo, y narra una historia de amor.
El septimo habla sobre la calidez de la primavera.
El octavo narra sueños epicos y resulta complejo de leer en ciertas estrofas.
El noveno trata sobre leyendas celtas y se ambienta en un circulo de piedras.
El decimo es muy musical y habla sobre las frias tierras septentrionales.
El undecimo y ultimo poema esta casi borrado y resulta ilegible, pero su belleza aun se deja notar en las pocas palabras que permanecen.
El undecimo y ultimo poema esta casi borrado y resulta ilegible, pero su belleza aun se deja notar en las pocas palabras que permanecen.
La deje donde estaba y segui caminando. ¡Vaya! ¿que tenemos aqui? El mitico volumen de tapas doradas acerca del mar y sus costas de arena blanca. Un libro con genero dificil de clasificar pero increiblemente atrayente. Pase de largo. Me apetecia visitar la seccion gotica, ¡que le vamos a hacer! me atraia irremediablemente.
Una vez que llegue, pasee la mirada entre los numerosos volumenes y me llamo la atencion un libro de gruesa pasta negra. Lo cogi, parecia interesante, su titulo brillaba en letras azules como el cielo y descubri que tenia un marcador con flecos. Sonrei. Le di la vuelta, lo gire varias veces entre mis manos y volvi a sonreir. No era un libro tan temible, su portada parecia querer esconder otro tipo de esencia en su interior. Volvi a posarlo y continue mirando la seccion.
Otra novela llamo poderosamente mi atencion. La cogi y me di cuenta de que su portada, de color pardo, estaba repleta de hermosos relieves. Bueno, realmente no eran tan bellos... ¿o si? ese libro me intrigaba mas que ningun otro, lograba algun tipo de efecto hipnotico sobre mi. Lo mire con mas atencion, consciente de que habia detalles que se me pasaban por alto, pero no podia evitarlo. Que preciosidad de relieves... por alguna razon estaba segura de que no tenia ningun tipo de contenido que me interesara, pero no podia dejar de admirarlo. Lo pose. ¡Anda! y aqui esta ese volumen tambien dorado con brillos castaños y titulo misterioso, jaja, me encanta. Muy cerca de él... ¿pero que hace aqui? un libro sobre musica encuadernado en cuero marron. No perteneces esta seccion amiguito... bueno, algun dia tendre que ordenar...
Prosegui mi marcha caminando sin pensar entre los diferentes pasillos, contemplando las columnas y las vidrieras... hay cosas que no cambian, uno no puede evitar ser como es. Aprete mi viejo libro... ¿mi? Aprete el viejo libro que escondia en la tunica y segui perdida en mis ensoñaciones hasta que llegue a la seccion de fantasia. ¡Ah! aqui habia novelas que me traian gratos recuerdos. Mire de pasada el antiguo volumen titulado "Las mil y una formas de enamorar a tu enamorado" y sonrei cuando muy cerca de este vi el otro acerca de los multiples y fallidos intentos en los que una simpatica bruja trataba de envenenar a su mortal enemigo, que a su vez era uno de sus mejores amigos. Y casi al lado ese libro tan extraño... es como si me hubieran escrito a mi en sus paginas, pero con ligeras variaciones. Nos parecemos tanto... Curiosa seccion esta de fantasia.
En el siguiente pasillo se encontraba la parte dedicada a las aventuras. Los viejos libros de piratas... como los echaba de menos, algun dia tenia que retomar contacto con mi volumen favorito, hacia siglos que no lo leia pero nada mas abrir sus paginas era como si el tiempo no hubiera pasado. La magia de algunas novelas...
Habia llegado a unas escaleras. Subi y me encontre con mas viejos conocidos, libros de tapas alegres que siempre me arrancaban una sonrisa, especialmente aquel viejo y pesado volumen cuya lectura en ocasiones se hacia realmente ardua, pero merecia la pena. Una sombra cruzo mi rostro. Acababa de recordar otro de mis libros favoritos, pero no lo veia en los estantes. Busque y rebusque y al final lo encontre al fondo de una estanteria con la que la humedad se habia tomado algunas libertades. Lo contemple con lastima y lo abri. Sus paginas estaban arrugadas aunque la letra aun resultaba legible, pero no pude evitar que algo se rompiera dentro de mi. Lo pose con cuidado en una zona protegida y confie en que se secaria y volveria a ser el de antaño.
Cerca de el encontre a otros dos viejos conocidos. Menudas risas con aquellos dos, entre sus paginas se escondian historias tremendamente originales y era imposible aburrirse con ellos. Pero era hora de subir las ultimas escaleras...
Escuche un ruido mientras subia. Me detuve un instante y luego camine hacia la procedencia de aquel sonido para encontrarme con un libro tirado en el suelo. ¡Ah, eres tu! Lo recogi con cuidado y lo mire con cariño. Enseguida mi cara cambio a una mueca de disgusto. Sonrei. Solo ese libro podia provocar tantas reacciones en mi y tan variadas. Estaba encuadernado en cuero negro y marron y su titulo brillaba en una especie de color castaño miel, pues en ese momento le daba el sol. Lo acaricie suavemente y lo coloque en la estanteria. Tu quedate aqui. No se para que le hablo, se que se volvera a caer. Y lo recogere. Quizas es culpa de mi nombre, quizas por eso no puedo dejar de leerlo. O quizas si... ¿a quien pretendo engañar?
Me aleje. Fui a mi estanteria favorita y vi uno de los mejores libros. Contenia una bella historia de esperanza, con sus partes oscuras y sus partes comicas, perfectamente entrelazadas. Fui muy afortunada de encontrar esa novela, me enseño muchas cosas...
Y por fin llegue. Subi la escalerilla que permitia acceder a los estantes mas altos y aprete con fuerza el libro que llevaba conmigo. Lo saque de mi tunica y lo mire, era precioso. Su cubierta era de colores terrosos y el titulo de un verde dificil de definir. Tambien tenia relieves y tallas, pero parecia que no todo el mundo era capaz de verlas, que curioso, para mi eran tan nitidas... Pero la autentica belleza de ese libro residia en su interior. Narraba una historia antigua, muy antigua, y estaba repleto de metaforas, comparaciones, similes y diversas figuras retoricas. A veces resultaba dificil de leer, aparte de que solia ser muy ironico, pero con el tiempo aprendi a ver entre lineas. Y cuanto mas lo leia mas me gustaba. Y cuando mas lo leia menos podia apreciar otros libros. Lo pose con mucho cuidado en una parte iluminada por el sol a traves de una de las vidrieras y sonrei nuevamente. El sol seguiria su incansable camino por la boveda celeste y pronto dejaria de estar iluminado... hasta que la luna ocupara su lugar.
Baje la escalerilla y me asome a la barandilla, ¡menudas vistas! Miles de libros y pergaminos se extendian debajo de mi, la mayoria me resultaban desconocidos, pero cada uno contenia una aventura, una poesia o un misterio a la espera de ser leido.
Contemple mi corazon.
Dedicado a todos los que formais mi mundo de metaforas.
5 comentarios:
Evita¡¡¡¡Yo a ti te encuentro en muchas descripciones delr elato tia...casi todas me pareces tu....y a mi sicneramente no me encuentro....jajaja¡¡eres tna metaforica k es practicamente imposible....jeje¡¡bsitos¡¡
Es ininteligible (al menos su totalidad) para todo el que no seas tú, pero eso le da un aire de misterio verdaderamente hermoso.
sabes?? yo creo que si entiendo, al menos parte, yo creo que se donde estoy...
tengo ganas de verte Evita!!
un besin!!
yo tb creo q sé dónde estoy....jops....q bonito... :)
no sé por qué me da que soy el musical que habla de las frías tierras septentrionales... es solo una idea....
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