28 diciembre 2010

Midnight light

Lo habia traicionado y eso nunca se lo perdonaria. Tenia ganas de huir de si mismo. No. No, en realidad tenia ganas de arrancar cabezas, para que engañarse.

La luna brillaba en el firmamento iluminando tenuemente el claro donde se encontraba. Corria veloz hacia el acantilado, queria descargar su furia aullando como nunca, la aldea se estremeceria bajo el manto de su voz. Oh, si, le oiria. No podria ignorarle, le oiria.
Poco despues alcanzo su destino, la roca que dominaba el pueblo y sus alrededores. La luz lunar le conferia una belleza indescriptible, pero era incapaz de verla, estaba demasiado cegado en su ira. Una vez subido a la piedra aullo con todas sus fuerzas.

El eco hizo que su voz aumentara hasta limites insospechados y durante un tiempo fue lo unico que pudo escucharse. Cierta parte de su mente se regocijaba pensando en lo que estarian imaginando cuantos le oian en ese instante, seguro que estaban atemorizados. Quizas le daba demasiada importancia. Le picaba un ojo y no podia rascarse con la pata sin hacerse daño. ¿Que pasaba? era incapaz de pensar con coherencia.

Dejo de aullar y se recosto sobre la roca. El picor de su ojo tendria que esperar. Lagrimeo mientras pestañeaba y se dio cuenta de lo estupido que debia de parecer. Con lo facil que era hacerse humano y rascarse. ¡A ver! ¡que no era en eso en lo que queria pensar! Tenia que dormir mas, claramente, su mente empezaba a vagar... Un jiron de niebla paso por delante suya y lo contemplo con la mirada perdida. Sabia que le necesitaban en el campo de batalla, las guerras contra los hechiceros se hacian mas cruentas y la aldea finalmente habia accedido a que les prestara apoyo siempre y cuando mantuviera su promesa de permanecer exiliado. Nadie mantenia sus promesas, ¿por que iba a hacerlo el? no le apetecia ponerse a pensar en las razones de los demas, su criterio bastaba para darle la razon absoluta. Era el unico que veia las cosas con perspectiva, todos los demas estaban equivocados. Con las luchas de magia y con todo. Alguna dia lo admitirian, solo hacia falta tiempo.

Un fino copo de nieve cayo en su nariz y miro hacia el cielo nocturno. No era epoca, pero volvia a nevar... tenia que encontrar la forma de que se detuviera...



Dedicado a Alvaro, feliz cumpleaños.

27 diciembre 2010

World of make believe

Cuenta la leyenda que los habitantes del Machu Picchu desaparecieron repentinamente un dia, siglos atras. La ciudad perdida de los Incas siempre ha ejercido un atractivo especial en todos los que se interesan por su historia, y con Pichu no iba a ser menos. El afamado arqueologo, que le debia su nombre a aquel lugar, estaba profundamente interesado en los misterios que le ofrecia y por eso se decidio a investigar el sitio, acompañado de una expedicion arqueologica que el mismo dirigia.

- ¡Es increible! -exclamo una de las arqueologas cuando sus ojos se posaron por primera vez en el lugar.
- Absolutamente -coincidio Pichu, que empezo a bajar a saltos hacia las ruinas.
- ¡Espera! ¡no nos dejes con todo aqui! -grito alguien señalando las mochilas y los diversos enseres que portaban.

Pichu no podia esperar, llevaba años soñando con una oportunidad asi. Por fin estaba frente a las ruinas que le habian dado nombre, sabia que algun misterioso secreto se encontraba enterrado en ellas y queria ser el primero en descubrirlo, debia ser el unico...

- ¡Mi tesssoooroo! -dijo imitando al conocido Sméagol- ¡eeelloss me lo robaaaron!
- ¿Pero que dices?

- ¡Ah! -exclamo sonrojandose y riendo- nada, solo me he emocionado al estar aqui, es un sitio privilegiado para investigar.

El arqueologo le miraba de soslayo dubitativo, no podia creer que aquel desequilibrado fuera su jefe, pero claro, habia sacado unas notas excelentes y se suponia que era inteligente. Quizas un genio. Y todos los genios estan locos. La sonrisa que le dedicaba era una prueba de ello, pero solo porque sonreia mirando hacia el infinito y señalaba algun punto indeterminado. El arqueologo, extrañado, se giro y vio un tremendo nubarron que se aproximaba hacia donde estaban y repentinamente empezo a llover copiosamente.


- ¡Todos a las tiendas de campaña!
- ¡Pero si aun no estan montadas!
- ¡Solo es lluvia! -grito Pichu, que paseaba relajado por las ruinas, disfrutando de los mensajes grabados que se volvian mas nitidos con el agua.
La tormenta duro poco tiempo y el sol comenzo a brillar intensamente. Los investigadores apenas podian creerselo y Pichu les explico que era algo natural del clima de la zona, asi que podian comenzar su trabajo. Las investigaciones en las ruinas durarian algunos meses pero no queria perder mas tiempo, estaba deseando encontrar algo. 



La mañana transcurrio de forma apacible hasta que una de las arqueologas, que acababa de encontrar un plato de arcilla, lo dejo caer al suelo con un fuerte estrepito.

- ¡Una pieza de artesania! ¡que ha pasado! -gimio Pichu, que volvia a poner voz de Sméagol de forma inconsciente.
- Acabo de ver... no es posible...
- ¿Que?
- Un animal... era pequeño y amarillo... ¡ahi esta! -señalo.
Pichu miro hacia donde apuntaba pero no vio nada.
- Sera cualquier animal normal... nada que justifique romper un plato...
- ¡No! era... era como... -comezo la chica sonrojandose.
- ¿Como que?
- ¡Ahi!


Esta vez Pichu se giro con rapidez y pudo ver una oreja negra y amarilla y una cara alegre. Jamas habia visto nada igual.

- ¿Lo has visto? era... ¡un pokemon!
- ¿Como va a ser un pokemon? -rio el joven arqueologo, aunque puso un leve gesto casi imperceptible- ¡no existen!
- ¡Era un pichu!
- Que casualidad... - Estamos en el Machu Picchu, con vuestro jefe llamado Pichu ¡y nos encontramos un pichu! demasiado raro para ser cierto...
- ¡Pichu! -dijo el animalillo, provocando que los otros dos se giraran. Estaba muy cerca de ellos y sus mejillas despedian pequeños rayos.
- Pobrecito, debe de haberse cargado de electricidad con la tormenta...


La chica no podia articular palabra y no entendia como su jefe podia estar tan tranquilo, sonriendo de aquella forma y alzando la mano hacia el animalillo. Nadie sabia que Pichu se habia encontrado unas tablillas antiguas en sus investigaciones que revelaban la posible existencia de aquel pokemon y habian dado vida a toda clase de leyendas. No lo habia revelado porque este seria su gran descubrimiento.

- ¡Pi! ¡pichu! -dijo el animalillo, que saltaba alegremente alrededor del arqueologo, que le habia caido muy bien.
- ¡Mira, sabe como me llamo! -bromeo Pichu.
- ¡Tenemos que..!
- No tenemos que. Ni debemos de. Este sera nuestro secreto.
- ¡No podremos ocultarlo durante mucho tiempo!
- Pero si lleva oculto hasta ahora... un poco mas de tiempo no significa nada. Os prohibo hablar de esto, ¡va por todos! -grito. Muchos de sus arqueologos se giraron y quedaron anonadados ante la imagen que veian, dudando de si era real.
- ¡Pichu! -dijo el pokemon.
- ¡Ese soy yo! ¡ven pequeñin, toma! -contesto dandole una galleta.
- ¡Pichu!
- Tu sabes algo mas de lo que dices...
- ¿Yo? -contesto Pichu, dandole otra galleta a su nuevo amigo.
- Si... ¡y nos lo vas a contar!
- Esta bien... -contesto el arqueologo incorporandose y mirando al animalillo.



 Dedicado a Javier, ¡feliz cumpleaños Pichu!

25 diciembre 2010

Christmas time

¡Felices fiestas a todos!

Como los de siempre ya sabeis que os quiero un monton querria hacer una mencion especial a mis compañeros de master, en los que he descubierto a gente que desde luego no me esperaba, en especial a un grupito de cinco por razones obvias y a algunos otros. Por orden alfabetico:

Guillermo: Bueno compañero de tren, siempre es un placer trabajar contigo, gracias por hacernos reir cuando ya estamos agotados de trabajar y por los chicles de limon, xdd.

Laura: ¡Burbu! ¡aun recuerdo el numero! me encanta haberte conocido y si, siempre hemos sido gente rara... ¡que le vamos a hacer! xdd.

Maria: ¡Me gustan tus arranques de genio! el trabajo del plan de accion tutorial no habria sido lo mismo sin ti.

Noelia: Eres mi inspiracion en cuanto a elegancia y ¡adelante con tus dotes teatrales! algun dia tenemos que volver a comer en el bar de la paloma, por los viejos tiempos.

Patricia: Eres la caña, ¡eso del Gamoneus Igitur no lo olvidare! sigue siendo asi de natural y genial, porque tienes unas cosas que hay que ver... xdd. Y sobre todo por hacernos reir tambien cuando no sabemos como seguir los trabajos.

Veronica: No crei que encontraria una persona que pensara de forma tan parecida a mi nunca. Gracias por todas esas charlas en clase, nunca cambies.


Tambien una mencion especial a Cristina, Maria Jesus, Nacho, Raquel y Victoria, sois gente estupenda y confio en que el año que viene sigamos apoyandonos en esta locura que esta siendo el master. Y por supuesto a Javi (Pichu) aunque no tengas que ver con este grupo. Me alegro de que hayamos vuelto a contactar despues de tantos años :)



Dedicado a todos mis amigos.

19 diciembre 2010

Filii Neidhardi

Hacia unos dias que Jeanpo se habia materializado con las chicas en la epoca presente y se habia adaptado a la nueva forma de vida con inusitada rapidez. Srynna y Wherynn habian decidido comentar en sus respectivas casas que se irian unos cuantos dias de acampada al Parque Azëbera, lo que les proporcionaba algo de tiempo para planear donde ubicar a Jeanpo los proximos meses y hacer que este se acostumbrara poco a poco a su aventura.

- En mis tiempos un par de jovenes yendose al bosque con un hombre no esta muy bien visto... -comento Jeanpo mientras caminaban por el parque buscando un sitio acogedor.
- En nuestra epoca tampoco, pero la gente es muy liberal -respondio Srynna.
- Yo no veo ningun hombre -murmuro Wherynn, que no estuvo muy segura de si su amigo lo habia oido hasta que este le lanzo un certero escupitajo.
- ¡Ese parece un buen sitio!

Srynna señalaba un claro al abrigo de los arces y robles oculto parcialmente por un alto repleto de hojarasca, pues el otoño se acercaba. Wherynn subio al alto para comprobar que todo estuviera en orden seguida de Jeanpo -pues ninguno se fiaba demasiado del criterio de Srynna- y encontro a una pareja en actitud muy romantica al otro lado de la pequeña loma.

- Lo que te decia, muy liberales -dijo Srynna, logrando que la pareja se separara avergonzada y los mirara mal- ¡seguid tranquilos, estaremos al otro lado! -les grito.
- Creo que les has cortado el rollo.
- Estais completamente locas... -comento Jeanpo, que empezo a reunir ramas caidas.
- ¿Que haces?
- ¡Construir un refugio! ¿o me vas a decir que tu sola puedes?
- ¡Yo no, pero Wherynn fijo que si! ¡es muy apañada!
- Tanto no... pero ademas para eso tenemos las tiendas de campaña hombre, no te molestes.
- ¿Las tiendas que?

Las chicas sacaron de sus mochilas -Jeanpo habia reconocido que tenian bastante mas capacidad que un atillo y habia aceptado portar una- algo que a el le parecieron unas mantas enormes con un tacto desagradable y las extendieron por el suelo.

- ¡Ah! eso. Pero necesitamos palos para que no se derrumben.
- Nosotros usamos estos palos de metal, son mas resistentes.
- Bueno... - dijo el joven tratando de doblar uno y casi rompiendolo- algo mas que una rama comun quizas. Esta bien, hagamoslo a vuestro modo.

Tras casi media hora tratando de montar las tiendas a lo Siglo XIII ("¡la media entre el V y el XXI!" como decia Wherynn, sin conseguir que los otros rieran) lograron que quedasen lo bastante bien como para no derrumbarse si hacia viento. Viento no muy fuerte.

- ¡Que bonitas! ¡la roja para nosotras! -exclamo Srynna señalando la mas grande.
- Pues claro, como todo un caballero me quedare con la pequeña -afirmo Jeanpo introduciendose en la verde y comprobando cuan espaciosa era en comparacion con las de su epoca- pero no me hareis dormir en esas cosas tan raras... las "tirillas". Dormire sobre la hojarasca con una manta.
- Esterillas.
- Tanto me da que me da lo mismo.

Wherynn se encogio de hombros riendo y se dirigio hacia una pequeña arboleda en busca del rio, pues creia oir su sonido. El susurro de los arboles, los gritos de Srynna cada vez que veia algo interesante y unos sospechosos ruiditos tras el altozano no la dejaban concentrarse.

- ¿Que es esto? -exclamo Srynna cogiendo algo del suelo.
- ¡Una tonteria, fijo! -grito Wherynn a lo lejos.
- ¿De donde la has sacado? -pregunto Jeanpo con la voz crispada.
- Estaba aqui tirada.
- No puede ser.

El joven se quedo contemplando la piedra con forma extraña y cuando Srynna se la tendio rehuso tocarla.

- ¿Que es?
- Es el simbolo de una "antigua" tribu guerrera, los Nöh.
- ¿Por que lo de "antigua"?
- Son de mi epoca.

La chica no se impresiono lo mas minimo y Wherynn se acerco para ver de que se trataba.

- ¿Que fue?
- He encontrado una piedra de los "No" -pronuncio mal Srynna.
- ¿Si? -bromeo la otra.
- Se llaman "Nöh" y no deberiais reiros. Es el clan mas sanguinario que ha existido.
- ¿Has oido hablar de las armas nucleares? -comento Srynna, a lo que Jeanpo le lanzo una mirada envenenada.
- ¿Que tienen que tanto los temes? -pregunto Wherynn.
- Traen la muerte consigo alla donde vayan y... me temo que hayan llegado a vuestros tiempos.
- ¡Que peliculero! -dijo Wherynn sin poder contenerse.
- Pero solo es una piedra... ¡podria ser un fosil!
- ¿Un que?
- ¡Eso es mio!

Los tres se giraron a la vez para mirar a la persona que habia gritado, que resulto ser la chica de la pareja romantica que habian encontrado anteriormente. El otro aun les miraba mal.

- Ha estado en mi familia desde hace generaciones... es una herencia del Siglo XIX.
- Es del Siglo V -dijo Jeanpo.
- ¿Estudias historia?
- La vivo.

La chica le miro sin comprender y cogio la piedra de manos de Srynna.

- ¿Y por que la llevas encima?
- De adorno, la tenia colgada de este cordon -la chica señalo su cuello- debe de haberseme caido... -dijo mirando de reojo a su novio, que desvio la mirada sonrojandose.
- Ya veo... entonces nada, ¡hasta luego!

Cuando se fueron Srynna miro divertida a Jeanpo.

- ¡Cazatesoros! la vida presente no es tan magica como piensas, me parece.
- No se, a mi no acaba de gustarme...
- Anda, coged una cantimplora y vamos a por agua. Mientras puedes contarnos algo mas acerca de los Nöh -dijo Wherynn y juntos se fueron hacia la arboleda.

 


Dedicado a Jeanpo, ¡feliz cumpleaños majo!

10 diciembre 2010

Winter, the ice (II)

Winter has come for me...

Alzo la mirada y sus ojos reflejaron la tenue luz de la estancia creando diferentes tonalidades en sus irises dependiendo de sus movimientos. Cristales de hielo adornaban su larga cabellera y su tunica de color azul cobalto, que brillaba con una misteriosa luz propia. Su palida piel y su gesto sereno recordaban la estacion de la que era dueña: el invierno.

I can't feel my senses
I just feel the cold
all colours seem to fade away


Se levanto de forma elegante e hizo un gesto amable a Äutûmn, que le cederia su puesto como reina, pues el solsticio estaba proximo. Tocaba el turno a las noches interminables, el frio helado y los paisajes nevados. Siempre se decia que la naturaleza estaba muerta en su epoca, pero la realidad era que las formas mas sutiles de la magia cobraban vida.

Tell me I'm frozen, but what can I do?
can't tell the reasons, I did it for you
when lies turn into truth, I sacrifice for you
you say that I am frozen... but what can I do?

Cuando se cruzaron una brisa helada cubrio el terreno y ambas sonrieron. Con suma elegancia se dirigio a su trono, que dominaba el reino desde un precioso acantilado y movio las manos hacia el paisaje. Finos copos de nieve comenzaron a cubrir la escena mientras las ultimas hojas caian y se fundian con la tierra. El ciclo de las estaciones seguia su curso inexorablemente.

I can't feel my senses
I just feel the cold...
f
rozen, but what can I do?
frozen...

Su voz lleno el lugar acompañada por los acordes de un cello y campanillas dejando que la magia fluyera y creara el hermoso paisaje invernal. Una vez acabado, se sento en su trono para admirar su belleza hasta el fin de su reinado.



Dedicado a los que adoran el invierno.

01 diciembre 2010

Ancient winds II

http://www.youtube.com/watch?v=AbRoGeygtLQ

Los vientos antiguos me dejaron en un lugar oscuro, ya habia anochecido. El brillo de las estrellas era la unica luz que podia guiarme por la inmensidad de aquel paisaje, pues no veia la luna. El silencio era profundo y camine lentamente atisbando en la oscuridad hasta encontrar lo que buscaba. No muy alejada de donde me encontraba habia una cueva cuya entrada estaba iluminada por una antorcha. El frio me rodeaba y a pesar de agradarme preferi acercame al calor y la luz, dejando el paisaje nocturno atras.

El interior de la cueva estaba fresco, pues las antorchas lograban darle calidez. Las piedras estaban llenas de grabados en lenguajes antiguos que no alcanzaba a descifrar y de extraños simbolos que parecian runicos y encerraban secretos mas alla de mi comprension. Los acaricie con suavidad y se iluminaron momentaneamente alla donde mi piel los rozaba. Algunos de ellos parecian quedar mas marcados que otros y se dibujaron en mi piel creando un mensaje cifrado. Lo observe a la luz de las antorchas y pude ver que eran runas que formaban el nombre con el que se me conocia y el nombre que le habia dado a mi alma, entre otras que no alcanzaba a entender. Aquellos grabados habian sido hechos por una antigua civilizacion a la espera de que los encontrara. Sonrei pensando en cuanto tiempo me habrian esperado tallados en las paredes y en la magia que debian tener aquellas personas para conseguir que se quedaran marcadas en mi piel despues de tantos siglos.

El aire fluia hacia el interior de la cueva y senti que los vientos antiguos me reclamaban hacia otro viaje. Acaricie los simbolos a mi paso y regrese al paisaje nocturno y su inmenso y hermoso cielo estrellado. La brisa se levanto con fuerza y deje que el viento me llevase consigo hacia un nuevo destino.



Continuara...