El silencio se apodero de los tres jovenes, que contemplaban ensimismados la mano de Wherynn tratando de interpretar que podia significar aquel mapa.
- "Nos reencontraremos para la lucha"... ¿que ha querido decir exactamente? -pregunto Srynna, suspicaz.
- Os dije que esa piedra...
- Tenemos que recuperarla.
Jeanpo y Srynna miraron a su amiga, que hablaba con voz profunda y cavernosa.
- Whers... -empezo Jeanpo, que temia que estuviera hechizada. Al menos mas de lo evidente.
- No, era por darle emocion, tranquilo. Pero en serio, tenemos que recuperar esa piedra -contesto ella con voz normal.
- ¡¡Darle emocion!! ¿¡te parece que estamos en posicion de bromear!?
- Relajate hombre, si bromea con el asunto es que no es para tanto.
Una sombra oscurecio la mirada de Wherynn y Srynna callo. Ocultaba algo... en fin, ella sabria.
- ¿Y como pretendes que la encontremos? -pregunto Jeanpo, aun enfadado.
- Tengo un mapa, ¡hoolaa! -saludo esta con la mano.
- Acabare escupiendote, en serio...
- No peleeis, vamos a concentrarnos en encontrar la piedra esa -tercio Srynna.
- Si, pero no esta noche. Yo por lo menos me voy a dormir, mañana pensaremos -dijo Wherynn.
Al dia siguiente abandonaron las tiendas de campaña en el parque y se dirigieron a la ciudad, donde vivia la chica que tenia la piedra. Wherynn habia trazado un plan lleno de lagunas para consegirla y Jeanpo trataba de solventarlas. Al menos la idea original incluia terremotos y vicisitudes de lo mas variopinto, por lo que estarian preparados para casi cualquier eventualidad. Una vez delante de la casa, un bonito chalet situado a las afueras, se escondieron tras unos matorrales y esperaron.
- Tu plan tiene tantas lagunas... -comento Jeanpo, que aun no habia sido capaz de resolver unas cuantas de ellas.
- Ya veras como la conseguimos, no sera dificil.
- ¿Que no sera dificil quitarle un colgante que lleva al cuello?
- ¿Quien dice que lo lleve todo el rato encima? por eso vamos a colarnos en su casa.
- Eso es allanamiento de morada, ¡estas dandonos mal ejemplo! -exclamo Srynna.
- Se la devolveremos, pero cuando ya no suponga un peligro. Solo la tomamos prestada un tiempo...
- Como aparezcan los Nöh...
- ¿Y que pinta tienen, por cierto? -pregunto Wherynn con curiosidad.
- Pues veras, no creo que esten vestidos de epoca y esas cosas... ¡yo que se! iran de incognito.
- ¡Mirad, ya sale!
Los tres se agazaparon tras los matorrales y observaron a la chica, que habia salido de la casa y estaba cerrando con llave, lo que les hacia suponer que no habia nadie mas.
- Se ha dejado una ventana abierta, ¡menos mal! eso facilita mucho la mision -suspiro aliviado Jeanpo.
- Anda, que tambien cerrar con llave y dejar la ventana abierta...
- ¡¡Sssshh!!
La chica se subio a un coche, abrio el porton de entrada y se fue, cerrando tras de si. Cuando se alejo en la distancia, Jeanpo, Srynna y Wherynn salieron de los matorrales y se colaron a traves de unos arbustos. Se aproximaron a la casa y contemplaron la ventana abierta, que pertenecia a la cocina.
- Bien, no parece que tengan perro, asi que solo nos queda saber si tienen alar... ¡¡Sry!!
Srynna habia trepado con poca agilidad por la ventana y habia entrado en la cocina, desde donde les hacia señas para que pasasen.
- ¡¡Pero como entras asi, y si llegan a tener alarma!!
- Tampoco sabemos cuanto va a tardar, ¡tenemos que ser rapidos! -se defendio la chica.
Cautelosamente, se deslizaron por la casa hasta encontrar la habitacion de la chica, que inspeccionaron procurando dejar todo tal y como estaba para que nadie sospechara que alguien habia estado alli.
- ¡La encontre! -chillo Jeanpo, emocionado.
- ¿Donde? -pregunto Srynna.
- En el joyero, ¡que suerte! ahora larguemonos.
- Un momento... ¿que es esto?
Wherynn tenia en sus manos unos pergaminos con los mismos extraños simbolos que adornaban la piedra.
- No creereis que... ¿es una de ellos? -pregunto a Jeanpo.
- Lo dudo, es una mujer...
- ¡Machista! -grito Srynna.
- ¡No lo digo por eso! en nuestra epoca ese clan solo estaba compuesto de hombres hasta donde yo se...
- Tal vez tenian mujeres espia o algo asi, nadie sospecharia de ellas.
- Es cierto...
- Si son tal peligrosos y esa chica puede ser una de ellos, ¿que hacemos aun aqui? -pregunto Srynna.
- Tiene razon, ¡vamonos!
Hacia rato que habia anochecido y Jeanpo aun reflexionaba sobre todo lo acontecido. Tenian la piedra, pero... Una sombra se movio entre los arboles y el joven se puso en guardia. La sombra alejo y Jeanpo suspiro. Aquella ardilla no portaba ningun mensaje, solo funcionaba de espia, y habian tenido la precaucion de esconder la piedra antes de regresar. Desde luego viajar al futuro estaba siendo mas emocionante de lo que jamas habria imaginado...
Hacia rato que habia anochecido y Jeanpo aun reflexionaba sobre todo lo acontecido. Tenian la piedra, pero... Una sombra se movio entre los arboles y el joven se puso en guardia. La sombra alejo y Jeanpo suspiro. Aquella ardilla no portaba ningun mensaje, solo funcionaba de espia, y habian tenido la precaucion de esconder la piedra antes de regresar. Desde luego viajar al futuro estaba siendo mas emocionante de lo que jamas habria imaginado...
Dedicado a Jeanpo, ¡feliz cumpleaños neno!
1 comentario:
Muchas gracias, wapa.
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